Llevo tiempo dándole vueltas a releerme alguno de mis libros más antiguos, así que eché mano de la parte más “polvorienta” de mi biblioteca y me decidí por este libro. La mayor parte de los libros del género que leí en mi adolescencia eran de Stephen King por lo que las historias están muy trilladas y a parte del placer de leer una buena historia es difícil que me sorprendan. Sin embargo con este libro no pasaba lo mismo, la verdad es que no me acordaba de él absolutamente nada. Solamente me quedaba un vago recuerdo de escenas brutales pero poco más. Está escrito por James Herbert, uno de los tantos escritores de terror completamente desconocidos para la mayor parte de nosotros, habiendo rebuscado algo sobre él (no confundir con otro escritor británico también llamado James Herbert pero de fantasía) parece que tuvo una edad dorada en los ochenta que empezó cierto declive en la década de los noventa, estando algo estancada en la actualidad, aunque sigue publicando. Con tantos años a sus espaldas podemos deducir que su obra es amplia y ha escrito bastante sobre ocultismo, fantasmas y mundos apocalípticos. Esta historia en concreto, va sobre una maldad que surge dentro una antigua casona de Londres. La oscuridad se convierte en un ente casi físico que enloquece a la gente convirtiéndola por la noche en maniacos homicidas, dando rienda suelta a la maldad humana que reside en todos nosotros. Todo parece estar relacionado con una secta que fundó un investigador paranormal y que sufrió un trágico final en esa misma casa. El libro está protagonizado por Bishop, un investigador que trabaja en desacreditar lo paranormal y en darle una explicación lógica, el profesor Kulek y su hija Jessica, un antiguo colaborador del fundador de la secta y Edith, una médium. Ellos se verán desde el principio envueltos en toda la oleada de crímenes que lleva consigo esta Oscuridad que se expande por la ciudad. El libro está dividido en tres partes bien diferenciadas. La primera en la que los investigadores acuden a la mansión a investigar los extraños sucesos acaecidos. La segunda en la que la Oscuridad va ganando poder y se va expandiendo por la ciudad y la tercera y última en la cual se narra casi un Londres apocalíptico. Para mi gusto hubiera quedado mejor si se hubiesen sido escrito en libros independientes porqué este escritor me parece que no tiene término medio y mezcla escenas de alta tensión con otras soporíferas por lo que hay veces que la historia te pega un frenazo muy brusco. Todas las partes acaban en momentos de gran acción y terror que sabes que no van a tener un final definitivo puesto que la historia continúa. Me resulta algo extraño que en una única historia de terror los protagonistas estén tan al borde de la muerte tantas ocasiones y que en la página siguiente estén continuando sus vidas como si no hubiese ocurrido nada, yo os puedo asegurar que si viviese esas situaciones no dudaría en marcharme de Londres a toda prisa. Por otra parte creo que las partes de acción en las que la Oscuridad actúa me parecen geniales (obviamente cada uno con sus gustos), consiguiendo una brutalidad y violencia que sin abusar de la casquería a mi me han conseguido poner la piel de gallina, posiblemente los recuerdos del final de la secta y la escena del manicomio son de mis favoritas. Resumiendo, diría que con este libro he tenido sentimientos encontrados y opuestos, por un lado partes algo lentas y por otras bastante terroríficas, creo que las últimas compensan las primeras por lo que el regusto que me deja el libro en general es bueno. La historia no está tan manida como otras y el concepto de la Oscuridad y sus posibilidades me ha gustado bastante por lo que creo que si alguien consigue hacerse con una copia del mismo, merece la pena dedicarle tiempo para su lectura.
martes, 23 de febrero de 2010
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